En esta primera década, la UVL sembró las bases de un modelo educativo innovador, enfrentando desafíos con pasión y visión. Fue una etapa de descubrimiento, de construir comunidad y de demostrar que aprender a distancia también puede transformar vidas. Aquí nació la esencia de lo que somos: una universidad que aprende junto con sus estudiantes.

Durante los siguientes años la universidad fortaleció su presencia, afinó sus programas académicos y se posicionó como referente en educación en línea. Esta etapa fue de crecimiento y reconocimiento, donde se multiplicaron las historias de éxito y se reafirmó el compromiso con la excelencia educativa. La visión inicial tomó forma y el sueño comenzó a expandirse.

En los últimos cinco años, la UVL ha vivido una etapa de crecimiento acelerado, innovación constante y transformación. 

Nuevas tecnologías, nuevos programas, nuevas áreas y una comunidad cada vez más diversa han marcado esta fase. Hoy miramos hacia adelante, listos para afrontar el futuro con creatividad, empatía y propósito.